Pintura: Tô Liên
sobre tu tersa piel.
Se enciende digno
en sus ojos calmos
ante cada amanecer.
Ella despierta
nuevas alegorías.
La observo,
comienzo
a entender,
que el mundo
gira a su imagen
cuando la veo
y comienzo a creer.
Tal vez
no recuerde
su nombre.
Quizás
no la vuelva a ver.
Tan solo se
que hay
un ángel
iluminando su ser.
Nace el sol de mayo…
La miro desnuda
otra vez…
Ella brilla
en mi mente
ahora,
mis letras
pueden dar fe.
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